Nunca he sido demasiado fanática del ultrarrealismo cinematográfico y por ende de los documentales, ya que en muchas ocasiones he sido obligada a ver alguno que otro ofrecido en la segunda cadena de Televisión Española sobre la diversidad mundial de la flora y fauna.

Aun así, a medida que mis estudios cinematográficos han ido avanzando e introduciéndome poco a poco en mundos poco usuales para mí, he llegado a ver con placer películas de cine independiente norteamericano -Shadows de John Cassavetes-, de la Nouvelle Vague francesa, el Free Cinema y también de la Nuberu Bagu japonesa -Testuo: The Iron Man de Shinya Tsukamoto- . Un sinfín de categorías que abarcan cines de corrientes algo marginales y desconocidas en los cines de distribución local.

Establecemos categorías para todo, incluso para los amantes del cine a los que llamamos cinéfilos -fans del medio-, pero os invito a profundizar en algunos metrajes que seguro que os sorprenderán que a continuación os menciono y desarrollo brevemente.

El primero de ellos vendría de la mano de un ya conocido Al Pacino, pero desmarcado de la saga de El Padrino. Como ya he dicho no soy amante de los documentales pero en este caso me atrapó. Hablo de Looking for Richard  

de 1996, la versión que conseguí fue original con subtítulos, pero eso no impidió mi finalización del film. Se realiza una investigación sobre el campo actoral y el cómo la cuna del cine, América, en muchas ocasiones se ve imposibilitada a enfrentar obras teatrales tan relevantes como las escritas por el británico William Shakespeare. 

Impresionante la actuación de Al Pacino que encarna al Rey Ricardo y a su elenco de actores que a través del método potenciado por Stanislavski y heredado por Lee Strasberg y su Actor's Studio conseguirán llevar a cabo cada una de las frases del libro.

El siguiente documental me sorprendió si más cabe que el anterior y es que no hay cosa más árida que ver un documental y que para más inri esté encabezado por un filósofo eslovaco, Slavoj Zizek. No hablo de otra que The Pervert's Guide to Ideology o La guía perversa de la ideología. A través del análisis de cosas que vemos tan rutinarias como una Coca-Cola, un café de Starbucks o comerte un Huevo Kinder, serán las que analice junto a películas tan emblemáticas como Tiburón o llegando a hablar del grupo alemán Rammstein. Nos invita a ponernos las gafas para despertar de la ideología en la que estamos sumidos y en la que todo lo que nos propone la misma nos parece de lo más normal. Dice que despertar de la ideología duele, pero ver uno de estos dos magníficos documentales no. Así pues, a ponerse las gafas.

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